miércoles, 24 de febrero de 2010

Lengua madre

Por Giulya.

En la caja hay una foto que la conmueve, una donde su madre ha de haber tenido la edad que ella tiene ahora. La imagen de colores desvaídos la remite a otro mundo, es el documento de una ausencia que podría tocar. Muda, de espaldas junto a la ventana de la cocina, en la casa de Aldao, con una niña que no es su hija en los brazos, una mañana o una tarde de invierno, su madre mira hacia la calle, alza ligeramente la cabeza, pensando en qué, esperando tal vez la oportunidad de decir algo, y ella se hunde en el territorio de los muertos, en la búsqueda desesperada de lo que fue, en la necesidad de comprender lo que pasó. Pueda que tenga que ver el que haya crecido en una familia de inmigrantes italianos tan propensos al melodrama, una familia donde la vida de los otros, los que vivieron antes, estaba siempre muy presente. Ella vio eso, formó parte de eso, se crió con gente grande en una casa donde nada era más importante que el amor, y entonces se pregunta porqué las cosas habrán sucedido de ese modo y por qué sus padres –por qué su madre que como ella se ha criado en esa casa- habrán ahogado sus mejores sentimientos para correr detrás de una idea… No sabe si será capaz de aceptar las respuestas que encuentre a esas preguntas, pero quisiera descubrirle un sentido a lo que ve, entender quién es y cómo fue que se hizo de ese modo, entenderlo a través de lo que hay en la caja.
(Fragmento)

2 comentarios:

  1. Me encantó, me tentaste a leerlo. ¿Me lo regalás? Jajajajajaja

    Besazos!

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  2. Llega un momento en la vida de cada uno, cuando ya nos hacemos adultos, que surge la pregunta fundamental: quiénes somos, de dónde venimos, por qué estamos aquí...A mí personalmente estas cuestiones me dan más qué pensar que el consabido a dónde iremos cuando ya no estemos aquí.
    Un saludo.

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